No quiero.
No quiero escribir pendiente de la melancolía.
No puedo.
No puedo imaginar una despedida.
Esperá,
No quiero dejarte.
No quiero volver a sentir ese vacío infinito,
ese nudo en la garganta,
esa sensación angustiante acompañada de lágrimas.
No pienses que sos reemplazable.
Un abrazo tuyo,
ese gesto tan particular e inconfundible.
Desde tu perfume,
hasta tu cariño,
todo lo que venga de vos, es único.



Copyright © 2010 • Ohyeahyam.