Guardemos lo nuestro.: 1/9/11

Y ahí estaba,

con un cigarrillo a medio terminar,

fruncía el ceño,

mientras contaba las monedas,

y con ellas los recuerdos;

se quejaba un poco

mientras el viento le enfriaba la espalda,

lo despeinaba,

sintiendo un porvenir completamente oscuro;

y lo difícil que sería volver a sentir un contacto piel a piel,

o una voz sincera, fuerte,

o de temeraria al olvido.

No pudiste con mi libertad,

no pudiste tocarme y menos robarme una lágrima;

No pudiste envolverte conmigo,

y no pudiste regalar tus sentidos.

Sentir la inquietud de verse fuera de redención.

♦

No te molestes en despejar las dudas,

sólo estrechemos la mano con el fracaso,

firmemos un retiro pacífico y sosiego

y pactemos sentimientos en el cielo.

Busquemos no adaptarnos al dolor,

sólo acostumbrarnos al sentir.

Estábamos injertos en una dimensión nostálgica,

y tu piel, tu piel era la mejor frazada,

pero el alrededor es destructivo,

es enfermizo e impulsivo;

y todas las oportunidades se evaporan

con tus ganas de ser un castillo de sueños,

y un dueto melancólico de risas,

y tenemos la certeza de saber que el universo nos encuentra

y que la realidad nos humilla,

nos ahoga y cuestiona.

(ph: cámara analógica/rollo)

Y con el humo de tu cigarrillo dibujás las palabras que no supiste decir,

pero tu amor es inefable,

y yo puedo permanecer vacía,

y sin interrogantes.

(ph: cámara analógica/rollo)

Solía mojar tus labios,

solía desarmarme en tus brazos,

solía compartir mi aliento, mis sueños, mis caprichos.

Solía regalarte mis lágrimas,

solía entrenar tu furia.

Solía enfrentar la melancolía.

pero las adicciones tienen un límite.

Desearía detenerlo, sólo en ese delirio momentáneo.

Sos increíblemente persistente,

y tu perfume aún no se va de mi cuerpo,

y tu cuerpo quiere seguir enmarcado en mi colchón.

Y mis cientos de dudas sin preguntar,

mis miles de besos sin regalar,

y mis millones de poemas sin un receptor a quien entregar;

se perderán en este cielo tan frío e infinito, que solía llevar tu nombre,
donde paseaba el viento, moviendo tu pelo y cosquilleando tu vista.

Hagamos un pacto con el viento,

que mis dudas le correspondan,
y mis besos, al mar,
y que la brisa de la mañana se quede con las frases y rimas
que con tanta dedicación recitaba.

Te llevaste mis muecas de gloria.
No dejaste más que un manuscrito implacable,
lleno de rencor y lágrimas, de hojas desechas y recuerdos rasgados.

Podría permanecer en el anonimato, hasta tu tan anhelado e inoportuno regreso;
y en esta cruda y silenciosa noche,
donde las estrellas sólo dibujan tu rostro, tus imperfecciones y tu mal humor,

¿qué mejor compañía que la melancolía y sus lágrimas?

Yo quiero mimos, sonrisas y canciones.

Yo quiero tardes de parque, noches de cine y mañanas de cuentos...

Yo quiero un 'te amo' de sorpresa,

que un abrazo y un beso disfracen un 'te extraño'.

Yo quiero soñar con vos,

y quiero robarme tus sueños y hacerlos míos.

Quiero robarme tu risa y escucharla todos los días.

Quiero guardar tus abrazos y dormir protegida.

Yo quiero tu boca, quiero tu piel y quiero tu aire,

Quiero volverme persuasiva ante tu orgullo,

y quiero esconderme en tu cuerpo sin que me encuentres.

(ph: cámara analógica/rollo)

Escupiste tu credibilidad,

tu confianza y tu autoestima.

Desarmaste los retratos acompañados

y envenenaste la memoria de un ser enamorado.

y ahora....

¿Quién mejor que vos para saciar a una puta sin sentimientos?